Mientras el gravel continúa ganando velocidad, la pregunta sigue en el aire. ¿No es lo mismo que ir por carretera? Desde los valores fundamentales hasta la preparación de la bicicleta y la experiencia de conducción, son dos disciplinas marcadamente diferentes.
El ciclismo de carretera y el gravel coinciden en algunos aspectos, como la prevalencia de las ruedas de 700c, los manillares y la euforia de un buen recorrido, pero son formatos diferentes, con sus propios retos, personajes, actitudes y peculiaridades.
El recorrido
El elemento técnico distintivo del gravel cambia la dinámica del ciclismo en grupo, lo que disminuye el efecto de resistencia, ya que la mayoría de las veces los ciclistas van en solitario, al contrario de lo que ocurre en el ciclismo de carretera. El terreno -impredecible, sujeto a las condiciones meteorológicas y no siempre fácil de leer- hace que la velocidad media general sea más baja.
Unas veces cargando, otras arrastrándose. Los resbalones siguen contando a veces, pero la elección de la línea y una visión clara de la ruta que tienes por delante pueden ser más importantes, haciendo que sea menos un deporte de grupo y más un esfuerzo en solitario. Considéralo como el ciclismo de montaña, donde tomar primero una curva puede significar la diferencia entre mantenerse de pie o no.
El reglaje de la bicicleta
Por norma general, las bicicletas de gravel tienen una mayor holgura para montar neumáticos más grandes y con más agarre. También tienen un eje de pedalier más alto para mejorar el paso de obstáculos y una geometría más similar a la de las MTB de campo a través, lo que implica un mayor alcance que se compensa con una potencia más corta para aumentar la estabilidad cuando se transita por terrenos abruptos.
También hay una diferencia clave en lo que respecta al cambio de marchas. En la actualidad, los ciclistas especializados en gravel prefieren una configuración 1x o 2x delante, con una relación de transmisión mucho más amplia y una marcha inferior más corta detrás, lo que proporciona más capacidad en las pendientes más pronunciadas y en los terrenos más embarrados.
El Di2 es una solución universal tanto para ciclistas de carretera como de gravel, aunque los que se aventuran en rutas de gravel de varios días prefieren el sistema analógico para facilitar el mantenimiento cuando pedalean fuera de las pistas más transitadas.
El número de soportes adicionales en una bicicleta de gravel también es algo que puede hacer dudar a los ciclistas de carretera más exigentes: ¿de qué sirve un buje dinamo o los soportes de la bolsa en la horquilla si lo que quieres es conseguir el tan importante récord de Strava?
Sin embargo, al igual que ocurre con el limitado calendario de carreras de gravel en comparación con las carreras de gravel de carácter más aventurero, las bicicletas de gravel destinadas exclusivamente a las carreras siguen siendo un pequeño segmento dentro de una disciplina en crecimiento.
El reparto
Algunos corredores de gravel utilizan licra. Algunos guardan plátanos en los bolsillos de sus culotes. Algunos llevan una taza de hojalata en la bolsa de la bici. Todo vale.
Existe la teoría de que el gravel es la disciplina más acogedora y sana de todo el ciclismo. Es muy diferente del ciclismo de carretera, que ha adoptado sin reservas la ropa de segunda piel. Siendo la resistencia aerodinámica la mayor forma de resistencia en la conducción por carretera (la gravedad también ocupa un lugar destacado, si vas por la montaña), una buena aerodinámica significa velocidad gratuita, algo que está en el núcleo de la cultura de la conducción por carretera.
El gravel, a medio camino entre la bicicleta de carretera y la de montaña, está atrayendo a algunos de los nombres más importantes del ciclismo. Esto quiere decir que puedes esperar ver a algunos personajes conocidos en las carreras más importantes, pero no van a estar necesariamente en cabeza.
Los valores fundamentales
Sería sumamente odioso reducir el ciclismo de carretera a una disciplina en la que el rendimiento y la velocidad lo son todo. Es justo decir que el gravel es más relajado y se centra más en la comunidad que su hermano mayor, exigente y limitado al asfalto. Claro que puedes vivir aventuras en una bicicleta de carretera, pero solo hasta que se acabe el asfalto.
Dado el mayor potencial (casi ilimitado) de las rutas y la mayor conexión con la naturaleza, la aventura a menudo supera a la aspiración dentro del gravel. Existe la creencia generalizada de que el ritmo de fiesta, es decir, rodar más despacio para disfrutar del lugar en el que te encuentras en lugar de centrarte solo en el destino, es la forma más satisfactoria de experimentar el gravel.
(Sin embargo, esto aún no se ha demostrado científicamente, por lo que el jurado aún sigue deliverando).
El espectro
En lugar de considerar el gravel como una disciplina específica, piensa en él como un espectro.
Por un lado, tienes un enfoque más centrado en el rendimiento, la velocidad y la táctica (piensa en los Campeonatos del Mundo de Gravel de la UCI, en las carreras de un día e incluso, hasta cierto punto, en las emblemáticas 200 millas de Unbound Gravel); y por otro, un enfoque casi de estilo MTB, en el que una configuración más robusta y capaz de la bicicleta es reflejo del terreno y pide a gritos aventura.
El ensanchamiento del manillar, la anchura de los neumáticos, la elección de la banda de rodadura y el cambio de marchas te situarán en algún lugar de este espectro invisible. Pero es un espacio en continuo cambio que carece en gran medida de estrictos criterios de inscripción y está totalmente abierto a nuevas experiencias.
El gravel es el polímata del mundo del ciclismo: una disciplina polifenética, apta para mochileros, de estilo cicloturista, todo terreno, que se mueve a caballo entre el mundo de la carretera y el del todoterreno. Al tratarse de una disciplina joven, aún gozamos de libertad para establecer convenciones e impulsar el futuro del deporte.
En este punto, no es fácil sacar conclusiones sobre el gravel. Pero una cosa es segura, el ciclismo de carretera ya no es la única superpotencia del ciclismo.
Acerca de Phil Gale:
Phil Gale es un periodista y fotógrafo afincado en el norte de Italia.